En un ambiente marcado por la controversia, el Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela declaró a Nicolás Maduro como ganador de las elecciones presidenciales del domingo, asegurando así su tercer mandato.
Según los datos del CNE, Maduro presuntamente obtuvo el 51,20% de los votos, frente al 44,2% logrado por el candidato opositor González Urrutia, representante de la Plataforma Unitaria Democrática (PUD). Estos resultados han generado un alto grado de escepticismo y denuncias de fraude por parte de la oposición y observadores internacionales.
"Quiero que sepan que hoy, Venezuela tiene nuevo presidente y se llama Edmundo González Urrutia. Ganamos contundentemente en los 24 estados del país", afirmó María Corina Machado, figura destacada de la oposición en la rueda de prensa post-elecciones.
Desde el cierre de las urnas, los líderes opositores habían expresado sus sospechas de irregularidades en el proceso electoral.
"El CNE paralizó la transmisión de actas y se estaban retirando a nuestros testigos en muchos centros de votación," declaró Delsa Solórzano, representante nacional de la coalición opositora.
Omar Barboza, secretario ejecutivo de la principal coalición opositora, agregó: "Hemos recopilado actas de votación oficiales del 30% de las mesas y muestran que González ganó ampliamente".
Edmundo González, quien fue un diplomático poco conocido antes de ser elegido candidato opositor en abril, se mostró optimista ante la presencia masiva de votantes y aseguró que trabajaría para revertir la crisis económica y social que ha provocado la emigración de millones de venezolanos.
Los resultados oficiales se anunciaron seis horas después del cierre previsto de los centros de votación, lo que aumentó la desconfianza en el proceso.
La candidata por el Partido Demócrata de los Estados Unidos, Kamala Harris, se pronunció a través de las redes sociales afirmando que “la voluntad de los venezolanos debe de ser respetada”. Harris y los Estados Unidos continuarán trabajando por tener una Venezuela más segura y próspera.
En la comunidad internacional, varios países ya se han pronunciado respecto al resultado de estas elecciones, Luis Arce, presidente de Bolivia, felicitó a Maduro por ganar en el día de ayer. Por otro lado, Chile, Perú, Panamá entre otros países se han negado a reconocer los resultados, destacando al presidente de Argentina, Javier Milei, quien se refirió a Maduro como dictador y pidió que reconociera su derrota.
Además, medios internacionales han destacado que las encuestas de salida mostraban a González con una ventaja significativa, lo que contrasta drásticamente con los resultados anunciados por el CNE.
Maduro, por su parte, desestimó las acusaciones de fraude y denunció "actos terroristas" que, según él, dificultaron el conteo de votos.
"Nadie va a llevar a Venezuela al caos. Yo soy Nicolás Maduro Moros, presidente-pueblo, y reconozco y reconoceré al árbitro electoral, los boletines oficiales y haré que se respeten", declaró tras emitir su voto.
La controversia en torno a estas elecciones marcan un punto crítico para Venezuela, ya que la oposición no muestra señales de rendirse.
La tensión en el país sigue alta y el desenlace de esta disputa electoral podría tener consecuencias profundas para el futuro de la nación.